Si bien la búsqueda de esquemas de financiación alternativos llevó a algunos diarios digitales a implementar el cobro por acceso (tarifas de suscripción) para sus ediciones digitales, como así el pago por algunos servicios especiales, los usuarios de internet no parecen estar dispuestos a pagar por información online, al menos la de tipo general, tal como lo muestran diversos estudios internacionales.
Esta dificultad solo parece salvable cuando algunos intereses profesionales, sociales o personales permiten a los lectores reconocer mayor valor en aquellas informaciones específicas.
Esto sucede, por ejemplo, con información de carácter financiero, razón que apenas le ha abierto el camino a los diarios especializados o económicos que comenzaron a repetir la experiencia del Wall Street Journal, que desde 1996 explota el modelo de contenidos pagos.
Puede entonces presumirse que el modelo de negocio para los sitios informativos en Internet tiene su principal apoyatura en los ingresos publicitarios.
Debido a las relativamente bajas barreras de entrada al sector, en Internet, y el alto precio de la producción de contenidos, el negocio de la difusión de información general en la red es muy difícil de rentabilizar.
Al presente, para la mayoría de los diarios digitales la ecuación ingresos-costos por usuario no se resuelve.
Esto es refrendado por la realidad misma de los medios digitales, así como por un gran número de análisis sobre casos prácticos (donde, por ejemplo, un website dedicado puramente a la provisión de contenido tuvo ingresos promedio por usuario y mes de 1,1 dólares frente a costos de 2,8 dólares), como los publicados por McKinsey Quarterly (www.mckinseyquarterly.com ).
Los medios offline tienen funcionamientos más rentables. Una emisora de televisión abierta recauda entre 10 y 15 dólares por usuario/mes, mientras que incurre en costes de entre 10 y 13 dólares usuario/mes. Por su parte un medio impreso ingresa entre 5 y 20 dólares y gasta entre 5 y 10 dólares.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario