En plena crisis policial en el interior del país, el ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, debió convocar de urgencia a efectivos de La Bonaerense. En la fuerza admiten que existe “tensión”. Un conflicto en Olavarría podría ser el germen en la Provincia.
El ministro de Seguridad de Daniel Scioli convocó de urgencia a efectivos de La Bonaerense ante la agudización del conflicto con las fuerzas policiales en las provincias del interior.
Los saqueos ocurridos en Córdoba, tras el autoacuartelamiento de efectivos policiales mantenía en alerta al gobierno de Daniel Scioli. Pero la expansión del conflicto a las provincias de La Rioja, Neuquén, Santa Fe y San Juan obligó al responsable de la seguridad en Buenos Aires a convocar de urgencia a efectivos policiales para contener posibles autoacuertelamientos.
Es que aunque los reclamos en la provincia de Buenos Aires están -por el momento- contenidos, la situación de los efectivos policiales es compleja. Un suboficial con nada menos que 20 años de antigüedad, cobra un básico de $1.300 pesos. Con las bonificaciones ronda los 7.000 y para superar esa cifra tiene que hacer horas extras.
“El sistema es perverso. El básico es insignificante con la idea de que el policía cumpla una mayor carga horaria y multiplique las horas-hombre en la calle. Todo resulta contraproducente, el desgaste hace que exista una gran cantidad de efectivos con carpeta médica”, explican fuentes del Movimiento Policial Democrático.
Para sumar ingresos los agentes de La Bonaerense pueden pedir horas Cores u horas Polad. Los dos sistemas funcionan como horas extras. En el primer caso se trata de sumar tareas de prevención para la fuerza. En el segundo, son tareas adicionales como seguridad de entidades públicas y privadas.
Otro de los puntos álgidos en los reclamos de la fuerza tiene que ver con el uniforme. En la Provincia, los suboficiales reciben una bonificación de 87 pesos para costear su uniforme. Según explican, ese plus no alcanza. Un pantalón cuesta 300 pesos; una camisa, 200; y un par de borceguíes, unos 400.
Desde el Movimiento Policial Democrático, una organización policial vinculada a la CTA, aseguran que por estas horas “existe una tensión peligrosa” en la fuerza.
Sin embargo, no consideran al autoacuartelamiento como una vía de protesta. “Los policías saben que ese no es el camino, por que si ellos se acuartelan desprotegen a sus familias. Esto es Buenos Aires, no Córdoba”, aseguran.
Además, aseguran que al contrario de lo que dijo Granados, ayer hubo unos 100 policías intentando frenar un saqueo en Villa Fiorito.
Granados y el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, establecieron un Comando Conjunto de Operaciones para coordinar acciones entre la policía provincial y las fuerzas federales.
Según se informó, las autoridades de ambas jurisdicciones seguían "muy atentos a los más de 150 focos de piquetes y reclamos en la provincia de Buenos Aires a consecuencia de la falta de luz" por el reciente temporal.
Los saqueos ocurridos en Córdoba, tras el autoacuartelamiento de efectivos policiales mantenía en alerta al gobierno de Daniel Scioli. Pero la expansión del conflicto a las provincias de La Rioja, Neuquén, Santa Fe y San Juan obligó al responsable de la seguridad en Buenos Aires a convocar de urgencia a efectivos policiales para contener posibles autoacuertelamientos.
Es que aunque los reclamos en la provincia de Buenos Aires están -por el momento- contenidos, la situación de los efectivos policiales es compleja. Un suboficial con nada menos que 20 años de antigüedad, cobra un básico de $1.300 pesos. Con las bonificaciones ronda los 7.000 y para superar esa cifra tiene que hacer horas extras.
“El sistema es perverso. El básico es insignificante con la idea de que el policía cumpla una mayor carga horaria y multiplique las horas-hombre en la calle. Todo resulta contraproducente, el desgaste hace que exista una gran cantidad de efectivos con carpeta médica”, explican fuentes del Movimiento Policial Democrático.
Para sumar ingresos los agentes de La Bonaerense pueden pedir horas Cores u horas Polad. Los dos sistemas funcionan como horas extras. En el primer caso se trata de sumar tareas de prevención para la fuerza. En el segundo, son tareas adicionales como seguridad de entidades públicas y privadas.
Otro de los puntos álgidos en los reclamos de la fuerza tiene que ver con el uniforme. En la Provincia, los suboficiales reciben una bonificación de 87 pesos para costear su uniforme. Según explican, ese plus no alcanza. Un pantalón cuesta 300 pesos; una camisa, 200; y un par de borceguíes, unos 400.
Desde el Movimiento Policial Democrático, una organización policial vinculada a la CTA, aseguran que por estas horas “existe una tensión peligrosa” en la fuerza.
Sin embargo, no consideran al autoacuartelamiento como una vía de protesta. “Los policías saben que ese no es el camino, por que si ellos se acuartelan desprotegen a sus familias. Esto es Buenos Aires, no Córdoba”, aseguran.
Además, aseguran que al contrario de lo que dijo Granados, ayer hubo unos 100 policías intentando frenar un saqueo en Villa Fiorito.
Granados y el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, establecieron un Comando Conjunto de Operaciones para coordinar acciones entre la policía provincial y las fuerzas federales.
Según se informó, las autoridades de ambas jurisdicciones seguían "muy atentos a los más de 150 focos de piquetes y reclamos en la provincia de Buenos Aires a consecuencia de la falta de luz" por el reciente temporal.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario