Entrevista a Ana Granato, dramaturga y actriz de la obra teatral “Pizarniketas polígrafas. Hay que irse a la bosta”, un homenaje poético teatral a la poeta Alejandra Pizarnik. El proyecto, dirigido por Gastón Santos, fue uno de los siete proyectos seleccionados para participar en la Bienal de Arte Joven.
Por Maricruz Gareca
APU: La obra fue uno de los 7 proyectos seleccionados para participar en la Bienal de Arte Joven, y con la tutoría de Alejandro Catalán. ¿Cómo fue la experiencia de ese trabajo?
Ana Granato: La experiencia dentro de la Bienal, ha sido re positiva para nosotros. Más allá de la estructura económica, de producción, difusión; fue la posibilidad de concretar un trabajo que hizo su proceso anticapitalista de dos años de ensayo por fuera del premio, respetando nuestras decisiones artísticas y nuestras búsquedas personales.
También la posibilidad de cruzarnos con personas que admiramos artísticamente en el ámbito del teatro como Mauricio Kartún o Ana Alvarado. Y especialmente Alejandro Catalán, que por sobre todas las cosas se súper comprometió con el proyecto, lanzándonos hacia otros lugares que no habíamos recorrido y que nos hizo crecer en lo construido felizmente. Siempre, más allá de la teoría uno aprende de los actos, de eso se trata este camino: del valor de la actuación, y con ello el de las personas, en momentos tan importantes. ¡Brindo por esos nuevos lazos!
APU: ¿Cómo surgió la idea de este texto? ¿Cómo se inscribe la poética de Alejandra Pizarnik en tu dramaturgia?
AG: La idea de este texto surge esencialmente de la necesidad imperiosa de salir del silencio, de acumular cuerpo y palabra dormida, omitida, susurrada. Ahora es la hora me dije justo cuando le dije a Gastón: Fue así que nos aventuramos al mundo de lo pequeño que fue y es un gran viaje hacia el teatro y la vida misma.
Yo en aquellas horas de desamparo escribía unos escritos que se suponían revolucionarían los géneros literarios y la gente no pararía de querer actuar “Pizarniketas Polígrafas”: que son unos textos en homenaje a la poesía menos conocida de Alejandra Pizarnik “La bucanera de Pernambuco o Hilda la polígrafa”.
Las Pizarniketas mezclan juegos de palabras nada ingenuos, donde el lenguaje se combina, enreda y agita entre lo soez y la alta literatura.
Así nace la primera poesía del manifiesto, como un juego desgarrado, mordiente, inscribiendo en la actuación de cordobesa exaltada algo del legado de la wonderwoman Alejandra.
Heredera ilegítima infame y deformante, decidí homenajearla a ella para hablar de todas o de todes, de todes los perdidos, los fuera de canon, los olvidados, los actuantes poéticos del silencio. Bah, digamos que una revancha hecha teatro, actuación.
APU: La obra propone un juego escénico en el que la actriz interactúa con un mundo de juguetes y objetos ¿cómo fue el proceso para crear esta atmósfera casi surreal?
AG: Los juguetes primero aparecen en mi biblioteca. La china que desde hace un tiempo es mi alter ego, fue la primera en proclamarse dentro de las Pizarniketas, en decir, los versos de amor que después fueron el pequeño gran manifiesto.
Los juguetes fueron siempre soporte de la actuación, compañeros de esta aventura, los textos fueron escritos y luego re escritos en otros textos cuando se probaba. Algunos nunca entraron. Todo tuvo mucho movimiento entre texto, juego con objetos, y actuación.
Durante dos años nos juntamos con Gastón dos o tres veces por semana a probar, a jugar. Nos sorprendíamos con lo que traíamos el uno al otro, no sólo juguetes divertidos y bizarros, también con textos que nos interesaban leer sobre, políticas de género, biopolítica, canciones o veces, el mate y la charla trascendental de nuestras propias vidas, de nuestras propias preguntas existenciales que se salvaguardaban a través del teatro y la amistad.
Los que hacemos teatro de “teatrito”, sabemos que el trabajo trasciende el escenario y por eso tiene tanta importancia para nosotros y por eso explota como una molotov amorosa inmortal tanto que no podemos dejar de irnos a la bosta ¡bien a la bosta con todo esto que sentimos y hacemos!
APU: El humor está presente a lo largo de toda la función, pero es un humor ácido, lleno de juegos con el lenguaje ¿cómo es el trabajo para construirlo?
AG: El humor es para mí, fundamental. No sé si hay un trabajo muy consciente con la idea de que haya humor, simplemente sucede, está en mi forma de escribir, de pensar, de vivir. Quizás ser cordobesa tenga su agregado en el tema, o trabajar en la Babel Orkesta hace 9 años también. Pienso que el humor es necesario para vivir mejor, una herramienta transformadora y seductora a la hora de pensar temas que no gustan ser pensados o hay tanto prejuicio sobre eso.
El humor es un gran combativo estomacal indispensable para sobrellevar la acidez del mundo y sobre todo en estos días. Salud y terminó. Bueno. No, sigo.
APU: La obra tiene una puesta en escena que requiere de una gran producción y, por tanto, de un equipo que los acompaña en la construcción de ese universo.
AG: Durante todos estos años nos acompañaron Virna Cortinovis Reina con el maravilloso .vestuario, que más que vestuario es un artefacto de la belleza, una escenografía con telas y formas, También Diego Leroux en la realización escenográfica y sonora en la desquiciada y desbordante creatividad con los muñequitos y sus soniditos.
También a Nico Purdía que nos acompaña con su ojo mágico en los videos, Astrid Mariana Urban que nos asiste, nos aguanta y nos llora emocionada un poquito en cada función.
Y a Carolina Morera en las mágicas fotos, a Brenda Maggio en su diseño trash de maquillaje, a la creativa Mariana Rovito en diseño gráfico y a Claudio del Bianco que nos iluminó mágicamente!
Ojalá no se vayan nunca lejos de mí. El mundo los necesita y yo también! Salud!
APU: ¿Cómo fue la recepción del público?
AG: Bueno todavía no pudimos hablar con todos, pero creemos que muy bien. Hablando en serio, aunque no está bien que lo diga yo, lo voy a decir igual: creo que la gente sale muy movilizada y nos han escrito y dicho cosas muy lindas, como que les provocaba libertad, o salir y hacer lo que tenían pendiente, un viaje, una obra, un libro (yo creo que también dan ganas de tener sexo pero nadie lo dice).
Las Pizarniketas, es una experiencia de la actuación, del deseo y del amor, y por sobre todas las cosas una gran invitación a irse a la bosta ¡biennnnnnnnnn a la bosta!
Ficha técnica:
Vestuario: Virna Cortinovis Reina
Realización escenográfica y sonora: Diego Leroux
Asistente de Dirección: Astrid Mariana Urban /
Diseñado de luces: Claudio del Bianco
Video: Nicolás Purdía
Fotografía: Carolina Morera
Maquilladora: Brenda Maggio
Diseño gráfico: Mariana Rovito
Prensa: Simkin & Franco
Dramaturgia y Actuación: Ana Granato
Dirección: Gastón Santos
Funciones: viernes 20.30hs, en Teatro: Pan y Arte (Boedo 876).
FB: /pizarniketas (agregar link: https://www.facebook.com/pizarniketas?fref=ts)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario