Mientras que el crecimiento de la economía norteamericana fue del 3,6% en el tercer trimestre, el desempleo cayó a su nivel más bajo en cinco años, alcanzando el 7% en noviembre. La economía de Estados Unidos creó 203.000 nuevos empleos en noviembre, lo que llevó a una disminución de 0,3% en la tasa de desempleo, para establecerse en un 7%, el nivel más bajo en cinco años, referencia del inicio de la crisis financiera. Los datos fueron divulgados el viernes por el Departamento de Trabajo.
En Wall Street se esperaba la creación de 180.000 nuevos empleos y la caída de 0,1% en la tasa de desempleo, por lo que los resultados mostrados por el gobierno fueron mejores a los esperados.
El dato es importante en vistas a la próxima reunión de la Reserva Federal, que tendrá lugar los días 17 y 18 de diciembre, y es probable que se decida un ajuste en los incentivos que la Fed inyecta en la economía. El Banco Central estadounidense está comprando un promedio mensual de 85.000 millones de dólares en deuda pública e hipotecaria, y desde entonces se ha creado una media de 190.000 puestos de trabajo por mes.
Los elementos más preocupantes en cuanto al trabajo son el desempleo de larga duración, que afecta al 37,3% de los desempleados y la baja tasa de participación en el trabajo, que con el 63% está en su valor más bajo en los últimos 35 años. Por su parte, el desempleo juvenil se ubica en 20,8%, a lo que se agrega los 7.700.000 personas obligadas a trabajar part time porque no tienen otra opción.
Hay en este momento 10,9 millones de desocupados. A ello se debe agregar los 2,1 millones de personas que están apartadas del mercado de trabajo por desmotivación y el subempleo está levemente por encima del 13%.
Crecimiento del 3,6% en el tercer trimestre
En lo que fue el mejor resultado desde el primer trimestre de 2012, la economía de Estados Unidos creció un 3,6% en el tercer trimestre del año.
Sin embargo, a pesar de los datos auspiciosos, el consumo, según los analistas, continúa vulnerable. El crecimiento se explicaría, en gran medida, por un incremento de los stocks, que tuvieron su mayor aumento desde 1998, contribuyendo con 1,68 puntos al PBI.
Sin embargo, la demanda interna se mantiene débil, ya que el consumo creció únicamente un 1,4%. Hacía 30 meses que no se veía un rendimiento tan bajo de este componente, del cual dependen dos tercios de la economía norteamericana.
La Fed sigue calificando el crecimiento actual como "modesto y moderado".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario