La sindicalización de las fuerzas de seguridad, otorgaría un espacio de legitimidad y legalidad al reclamo lógico de todo trabajador, en un esquema de paritarias.
Las paritarias armadas y con envío de socios operativos a saquear organizadamente, no es una alternativa. La única alternativa es la sindicalización, resistida, ya que las fuerzas de seguridad, históricamente han sido utilizadas para reprimir la demanda y la contestación social, y por eso no cabía dentro de su organicidad el reconocerse como trabajadores y sentarse en paritarias a golpear la mesa. Eso a 30 años de democracia quedó atrás.
Si los médicos pueden sindicalizarse e ir a una huelga, dejando un esquema mínimo en los hospitales pero con cobertura para toda la población, también los polícias pueden plantear demandas, descompimir hacia adentro y hacia las bases, reclamar para vivir mejor y hacerlo dentro de un marco ordenado, sin dejar en la indefensión a la población.
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